
"A veces, lo siento venir, como una lágrima. Siento que mis ojos se llenan de lágrimas", dijo el muchacho compungido.
Su madre, Tammy Mynatt, refirió que sometió a su hijo a todo tipo de estudios, ultrasonidos, resonancia magnética, pero ningún médico ha sido capaz de diagnosticar la enfermedad de su hijo.
De hecho, fue tanta la sorpresa que al llorar sangre llamaron al 911.
"La cosa más espantosa que en mi vida me pasó fue cuando él me miró y dijo: 'Mamá, me voy a morir?" Ahí mismo se me rompió el corazón ", dijo la madre.
En tanto, el oftalmólogo Dr. Rex Hamilton les dijo a "Good Morning America" que Inman podría estar sufriendo de una condición llamada Haemolacria, que significa "lágrimas de sangre".
Lo que no es poca cosa. Pues muchas veces tal manifestación, lejos de ser émulo de vírgenes o santos, es una condición seria que anticipa alguna enfermedad.
Aunque esperamos que sea una conjuntivitis bacterial, y no algo más grave.

Luego dirán que estamos en pleno siglo de avances, pero estos casos sacuden todavía a las personas gracias a los medios que los excitan.