La misteriosa desaparición de Jacobo Grinberg

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Le apodaban el Einstein Mexicano. Y toda su vida la dedicó a desentrañar los misterios que rodean a la conciencia humana, y el papel que jugaría en cómo percibimos la realidad. 

En 1994 la tierra se lo tragó: desapareció sin dejar rastro. ¿Qué fue lo que sucedió?. ¿Realmente atravesó la Matrix, como muchos de sus seguidores sugieren? 

Jacobo Grinberg era científico, pero fuera de lo común. Estudió neurofisiología en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y su afán era explorar la influencia de la conciencia sobre la realidad. Por eso se puso a investigar a chamanes mexicanos, llegando a explorar los fraudes de las cirugías psíquicas y la materialización de objetos, que son trucos simples de prestidigitación que suelen engañar a los científicos. Pero él se los creyó y esbozó teorías.

Al meterse con los cirujanos psíquicos enseguida alentó varias críticas. De esta manera, explorando culturas (por no decir charlatanes), desarrolló su Teoría Sintérgica, una hipótesis donde plantea que la realidad no es objetiva, sino una construcción de la conciencia humana, algo que hemos visto también en los libros de Carlos Castaneda. Y no es casual, ambos se conocían.

Grinberg y al lado la imagen de Carlos Castaneda


Según Grinberg todos creamos este mundo como una suerte de construcción holográfica colectiva, donde no solo somos espectadores sino que podemos modificar la realidad. Según este enfoque, la mente crea una matriz para interpretar el mundo y bajo algunas circunstancias especiales podría abrir puertas a otros niveles de existencia – quizá como los estados con DMT, aunque para Grinberg era el traspaso a otra realidad, tan auténtica como la que vivimos. 

Ruth Cerezo, ex colaboradora de Grinberg, mencionó como llevaba a cabo sus experimentos de potencial transferido: 

“Imagínate que estamos tú y yo y nos dicen ‘vamos a hacer un potencial transferido’, entonces nos dejan interactuar para generar un sistema, nos ponen en dos cámaras de Faraday y a ti te mandan flashes.Tú estás con los ojos abiertos, estás viendo los flashes y se va a generar un cambio en tu células registrado por un electroencefalograma; yo, que estoy en la otra cámara completamente oscuras y en silencio, esperaríamos que no pasara nada, pero lo que encontramos es que en mi cerebro también existió potencial, no tan grande, pero exactamente en el mismo punto y en el mismo tiempo”. 

 
DESAPARICION MISTERIOSA 




El 12 de diciembre de 1994, Grinberg desaparece y el misterio comienza. ¿Es que al final habría pasado a otra realidad en virtud de sus experimentos?. Para agregar más condimentos al enigma, todas sus cosas, sus pertenencias, documentos, pasaportes, estaban en su casa. 
 
Días antes de su desaparición algunos testigos señalan que se lo veía nervioso. Se dice que “sabía demasiado”. Se encontraron que algunos de sus documentos habían sido eliminados, sugiriendo la teoría de que lo secuestraron por la información que manejaba. Además, su coche lo encontraron en el aeropuerto de la Ciudad de México, aunque, al menos con su nombre, no abordó ningún avión. 

La coincidencia de que otros científicos que investigaban la conciencia y lo paranormal también hayan desaparecido en esos años sugiere una suerte de conspiración, pero indemostrable. Se esbozaron muchas teorías inquietantes sobre la desaparición de Grinberg, desde de que fue asesinado para evitar que sus trabajos fueran publicados, hasta la posibilidad de que atravesó la matrix y está viviendo en una realidad no ordinaria, quedando en una suerte de mundo paralelo. 

A casi 30 años de su desaparición, Grinberg sigue siendo un misterio que ningún documental pudo del todo descifrar. 


CONCLUSION PROVISORIA

Grinberg junto a su esposa Teresa

En lo personal me inclino a explicaciones más racionales y próximas a la realidad que vivimos, sin entrar en misterios de telepatía, mundos paralelos, etcétera. Creo que pudo haber una suerte de crimen pasional. Me explico.

Se sabe por testigos que Grinberg temía a su esposa Teresa Mendoza, quien, dicho sea de paso, se valió de la desinformación para ocultar la desaparición de su esposo, diciendo que estaba de viaje. 

Un mes más tarde, Teresa Mendoza, también desaparece. Nunca más se supo de ella. 

Es interesante el temor que le infundía su mujer al punto que había adaptado su coche para poder dormir en el mismo, según amigos cercanos a Grinberg. Este detalle no es menor. 

Podemos explorar más esta arista en el documental El secreto del doctor Grinberg donde incluso se lo ve abordando una avioneta junto con su esposa por un testigo. 

Es un tema interesante para investigar, que ya profundizaré en su debido momento. Pero todo me sugiere un crimen pasional, bastante alejado de complots, viajes por la Matrix, agentes federales secuestrándolo por sus descubrimientos, etcetera. 

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