Los viajes astrales de William Buhlman

0

William Buhlman es un hombre que escribió un libro donde narra sus experiencias con los llamados viajes astrales. 

¿Qué son? Sería algo así como salir del cuerpo bajo una forma etérea, invisible al ojo humano, y pasearse fuera del cuerpo por donde uno quisiera. 

En su Aventuras fuera del cuerpo, narra paso a paso lo que hizo. Y muchas personas han decidido seguirlo en sus técnicas. Y es que, en el libro – que leí hace años atrás – se lo ve sincero, con una búsqueda genuina, y claro, lo que narra es asombroso. 

Sin embargo, cuando empezamos a investigar la trayectoria de Buhlman vemos que se trata de uno más de los típicos vende humo que luego dan conferencias, venden sus libros, y viajan por todos lados asesorando a las personas que intentan salir del cuerpo

Pero, más allá de eso, ¿es cierto lo que cuenta Buhlman en su libro? ¿Es posible controlar los sueños y salir del cuerpo?. 

Lo que hace Buhlman no es otra cosa que inducir un Sueño Lucido, o sea, un Sueño Consciente. 

Ya en 1867 el francés Léon d'Hervey de Saint-Denys, en su obra “Los sueños y cómo controlarlos”, explica las técnicas que se deben usar para controlarlos y generar la sensación que uno despierta dentro del sueño y poder luego dominar el contenido y desarrollo del cuadro onírico. 

Filósofos y grandes pensadores alguna vez tuvieron sueños lucidos, entre ellos, René Descartes y Nietzsche, e incluso Sigmund Freud acepta que es posible mantener cierta conciencia y albedrio dentro del sueño. 

Ahora bien, este estado de nuestro escenario onírico, controlado mediante técnicas, ya lo definía Carlos Castaneda en su El Arte del Ensoñar, pero claro, con un sentido metafísico y chamánico. Lo mismo ha hecho Buhlman: supone que se sale del cuerpo y que, por tanto, existe un alma; otro Yo además del cuerpo.

No son otra cosa que las caras de una misma moneda. 

Los sueños lucidos existen, se ha demostrado científicamente que son estados posibles de nuestra conciencia, pero de ahí a que esto signifique un viaje astral o que son evidencias de un alma hay un abismo.  

Responden a nuestra fisiología y a cómo entrenemos nuestra mente a la hora de dormir, pero sin mente no habría tal estado. Y la mente, debe quedar claro, es un producto de nuestro cerebro. 

Sin cerebro no hay mente – conciencia - ni estado que sea posible. 

El problema con todos aquellos cultores del esoterismo de turno es que interpretan incorrectamente un estado poco divulgado de nuestra conciencia, buscan generarlo mediante técnicas, y luego deducen bajo una falsa premisa que tienen una evidencia de un alma o un espíritu saliendo del envoltorio de la carne. 

Hay que seguir explorando el asunto.

Publicar un comentario

0Comentarios

Telegram del autor:@SJarre