Bueno. No todavía como uno quisiera. No como la película La mosca o como Jumper. Pero estamos avanzando.
Desde 1993 el equipo del físico estadounidense Charles Bennett, en el Centro de Investigación Watson de IBM en Nueva York va produciendo algunas teletransportaciones. En 1998 lograron del Instituto Tecnológico de California teletransportar un fotón (una partícula que transporta la luz). En 2002, un equipo de la Universidad Nacional Australiana logró teletransportar todo un haz láser. En 2004 , un átomo. Y en 2006, del Instituto Niels Böhr de Dinamarca, información almacenada en un rayo láser hacia una nube de átomos.
No es gran cosa, pero es algo.
La teletransportación se basa en la teoría quántica, de la que ya hablamos en su momento, relacionada con el fenómeno conocido como “Entrelazamiento” (aquello que Einstein bromeaba diciendo “acción fantasmal a distancia”)
De momento se produce a una escala atómica y subatómica. No se ha trasladado ningún objeto físico, sino partículas. Y lo que se hace es mover la información necesaria para que sean duplicada. Y ahí yace aquella pregunta filosófica si pudiéramos transportar a una persona ¿ La copia de uno es uno?
Pues, como se sabe, la información del ser humano original dejaría de existir y quedaría su copia…
Desde 1993 el equipo del físico estadounidense Charles Bennett, en el Centro de Investigación Watson de IBM en Nueva York va produciendo algunas teletransportaciones. En 1998 lograron del Instituto Tecnológico de California teletransportar un fotón (una partícula que transporta la luz). En 2002, un equipo de la Universidad Nacional Australiana logró teletransportar todo un haz láser. En 2004 , un átomo. Y en 2006, del Instituto Niels Böhr de Dinamarca, información almacenada en un rayo láser hacia una nube de átomos.
No es gran cosa, pero es algo.
La teletransportación se basa en la teoría quántica, de la que ya hablamos en su momento, relacionada con el fenómeno conocido como “Entrelazamiento” (aquello que Einstein bromeaba diciendo “acción fantasmal a distancia”)
De momento se produce a una escala atómica y subatómica. No se ha trasladado ningún objeto físico, sino partículas. Y lo que se hace es mover la información necesaria para que sean duplicada. Y ahí yace aquella pregunta filosófica si pudiéramos transportar a una persona ¿ La copia de uno es uno?
Pues, como se sabe, la información del ser humano original dejaría de existir y quedaría su copia…
