A veces parece que la ficción escribe la realidad. Películas que luego se vuelven reales. Y sin embargo, en este caso, la realidad sucedió hace miles de años y fue el arte hollywoodense quien se acopló a la historia. Pero el arte es arte no importa donde y cuándo suceda.
Me refiero al hallazgo en Petra, donde se rodó Indiana Jones, de un Grial que guarda características muy similares al de la película.
Parece que un equipo internacional de arqueólogos, incluyendo al profesor Richard Bates de la Universidad de St Andrews, ha descubierto una tumba del siglo I d.C. justo bajo el icónico Tesoro de Petra. Esto podría ofrecer pistas sobre la civilización nabatea.
Pero lo más insólito fue el esqueleto que encontraron sujetando un recipiente de cerámica. Tenía un enorme parecido con el Santo Grial de Indiana Jones, como indicó Josh Gates.
La explicación es simple: las ideas se repiten. Algunos usan esas ideas con fines rituales; otros con fines de entretenimiento. Pero de fondo, todo es arte. Lo que separa una idea de otra, en este caso, es el tiempo.