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Isha (“Jennifer Lee Duprey” o “Maharishi Sakti Ishaya”) es una autotitulada maestra espiritual que, cómo no, ha ganado muchos partidarios en América Latina.
Quizá, digo yo, por aquello de que en nuestras latitudes hay una necesidad de paliar los déficit materiales inalcanzables con los espirituales, más a la mano.
Y claro, para ello, Isha creó un sistema de autosanación y ampliación de la conciencia.
A igual que El Arte de Vivir, se acerca a ese sector dejado de la mano del Estado, este es, los pobres, para ganar prestigio y lograr justificar su Fundación Isha Educando para la Paz. También, dirige su mirada a los criminales en penitenciarias.
Y como no va a hacerlo si, como vemos en la foto, es amiga de Sri Sri Ravi Shankar, otro millonario que hace lo mismo y que el año pasado su fundación de Buenos Aires recibió 20 millones de pesos en donaciones de sus fieles.
Pero en el caso de Isha los ex fieles, en Buenos Aires, la escracharon. Denunciaron su secta como peligrosa y con ramificaciones internacionales.
Como vemos en el documento de canal 9, los fieles rompen sus carteles publicitarios, y revelan las denuncias ante la justicia por los manejos de la fundación Isha y la propia fundadora.
Una mujer denunciante (Paula) dice:
Y añade que, tras la secta, “la única salida para mi era el suicidio; o sea una manipulación de la mente total y absoluta”
Más allá de las denuncias, a menudo me sorprende el exclamado narcisismo de estas autoproclamadas maestras espirituales: siempre la mirada modelada ante las cámaras, el perfil de ceño penetrante, la pose justa en el momento justo.
¿Será esto en lo que consiste la iluminación espiritual que ha conseguido Isha, es decir, saber posar para las cámaras?
Bueno, por algo es la gurú de los famosos que, acostumbrados al mismo desempeño ante las cámaras, buscan su igual en la gurú. Por algo, su maestra (Isha) dice:
Yo prefiero imaginar que en cada espejo veo reflejado a un niño muriendo de hambre, y que ese niño soy yo, y mientras siga muriendo de hambre yo estaré muerto de hambre aunque me quiera, me ame a mi mismo, esa es la imagen que me devolverá el espejo…salvo que la insensibilidad, aliada al narcisismo, olvide aquellas problemáticas de la humanidad. Pero ese soy yo, un pobre diablo sin dinero, y no un multimillonario que vive a expensas de las creencias de las personas.
Veamos un poco la filosofía de Isha.
EL SISTEMA DE ISHA
En principio es una falacia dicho sistema. Dice su sistema que no es necesario creer en nada, pero habla de algo que opera a nivel “energético-espiritual” lo cual ya conlleva una creencia implícita.
Dice:
Luego comienza la dogmatización cuando refiere que sus Siete Llaves son una especie de revelación divina obtenida a través de la iluminación.
Y claro, para saber en qué consisten esas llaves debes pagar 100 dólares, leerte su libro que vale su otro dinero, y luego te enteras. Y para asegurarse que, una vez comprado el sistema, no lo divulgues, los instructores se encargan de decirte que es secreto y sólo lo pueden divulgar ellos que son maestros preparados.
Afortunadamente hay personas que no le hacen caso (click aquí) y podemos ver de qué va el sistema que, como es obvio, no es otra cosa que un remanido rejunte de patrañas metafísicas sin un ápice de evidencias que las respalden.
Las clásicas visualizaciones al estilo de Rudolf Steiner, que he practicado en mi juventud durante interminables horas y sólo me dejaron el sentimiento palpable de sentirme un estúpido.
Ella dice que su sistema es a prueba de escépticos, y sin embargo lanza:
Quizá, digo yo, por aquello de que en nuestras latitudes hay una necesidad de paliar los déficit materiales inalcanzables con los espirituales, más a la mano.
Y claro, para ello, Isha creó un sistema de autosanación y ampliación de la conciencia.
A igual que El Arte de Vivir, se acerca a ese sector dejado de la mano del Estado, este es, los pobres, para ganar prestigio y lograr justificar su Fundación Isha Educando para la Paz. También, dirige su mirada a los criminales en penitenciarias.Y como no va a hacerlo si, como vemos en la foto, es amiga de Sri Sri Ravi Shankar, otro millonario que hace lo mismo y que el año pasado su fundación de Buenos Aires recibió 20 millones de pesos en donaciones de sus fieles.
Pero en el caso de Isha los ex fieles, en Buenos Aires, la escracharon. Denunciaron su secta como peligrosa y con ramificaciones internacionales.
Como vemos en el documento de canal 9, los fieles rompen sus carteles publicitarios, y revelan las denuncias ante la justicia por los manejos de la fundación Isha y la propia fundadora.
Una mujer denunciante (Paula) dice:
“Es una secta destructiva y así me captaron a mi (a través del cartel que está rompiendo) y me arruinaron la vida”
Y añade que, tras la secta, “la única salida para mi era el suicidio; o sea una manipulación de la mente total y absoluta”
Más allá de las denuncias, a menudo me sorprende el exclamado narcisismo de estas autoproclamadas maestras espirituales: siempre la mirada modelada ante las cámaras, el perfil de ceño penetrante, la pose justa en el momento justo.
¿Será esto en lo que consiste la iluminación espiritual que ha conseguido Isha, es decir, saber posar para las cámaras?
Bueno, por algo es la gurú de los famosos que, acostumbrados al mismo desempeño ante las cámaras, buscan su igual en la gurú. Por algo, su maestra (Isha) dice:
"Imagina que te miras al espejo,
y el rostro que se refleja es el de alguien a quien realmente amas.
Sólo imagina…."
Yo prefiero imaginar que en cada espejo veo reflejado a un niño muriendo de hambre, y que ese niño soy yo, y mientras siga muriendo de hambre yo estaré muerto de hambre aunque me quiera, me ame a mi mismo, esa es la imagen que me devolverá el espejo…salvo que la insensibilidad, aliada al narcisismo, olvide aquellas problemáticas de la humanidad. Pero ese soy yo, un pobre diablo sin dinero, y no un multimillonario que vive a expensas de las creencias de las personas.
Veamos un poco la filosofía de Isha.
EL SISTEMA DE ISHA
En principio es una falacia dicho sistema. Dice su sistema que no es necesario creer en nada, pero habla de algo que opera a nivel “energético-espiritual” lo cual ya conlleva una creencia implícita.Dice:
“Las facetas del Sistema Isha son nuevas y únicas. No tienen relación con ninguna técnica de respiración, meditación, control mental, ejercicios de yoga, Reiki ni con filosofía o creencia alguna.”
Luego comienza la dogmatización cuando refiere que sus Siete Llaves son una especie de revelación divina obtenida a través de la iluminación.
Y claro, para saber en qué consisten esas llaves debes pagar 100 dólares, leerte su libro que vale su otro dinero, y luego te enteras. Y para asegurarse que, una vez comprado el sistema, no lo divulgues, los instructores se encargan de decirte que es secreto y sólo lo pueden divulgar ellos que son maestros preparados.
Afortunadamente hay personas que no le hacen caso (click aquí) y podemos ver de qué va el sistema que, como es obvio, no es otra cosa que un remanido rejunte de patrañas metafísicas sin un ápice de evidencias que las respalden.
Las clásicas visualizaciones al estilo de Rudolf Steiner, que he practicado en mi juventud durante interminables horas y sólo me dejaron el sentimiento palpable de sentirme un estúpido.
Ella dice que su sistema es a prueba de escépticos, y sin embargo lanza:
"La vulnerabilidad va de la mano de la inocencia. Es importante ser reales, ser nosotros mismos en cada momento. Para la sanación completa -para poder ser un 100% divinos-, tenemos primero que permitirnos ser un 100% humanos" –Isha
¿Quién duda que es 100% humano?. Sólo veo a los "alienígenas" y contactados de turno levantar la mano para decir que 100% no lo son.
Justamente darnos cuenta de ello (que somos 100% humanos) nos evita pensar que somos 100 % divinos pues comprendemos mejor que nadie nuestra naturaleza, donde se origina nuestros instintos y de donde proviene ciertas formas de comportarnos gregariamente.
Con esto evidencia Isha que no tiene idea de lo que habla. Pero es que si fuera coherente nadie le haría caso.
CONCLUSION
Al examinar la filosofía y las técnicas de Isha, para cualquier persona con un mínimo de sentido común, no le resultará difícil darse cuenta que es un timo. Un engaño más de los charlatanes de turno que amasan fortunas a costa de gente que quiere sentirse mejor o que se sienten insatisfechos con lo que tienen.
No reviste un análisis profundo porque no es profundo para nada el sistema. Lo que si es delicado es que se trata de una secta que acusa denuncias por “uso ilegal de la medicina”, lavado de dinero por donaciones, manipulación psicológica y demás.
En los años 80 este tipo de movimientos eran caratulados enseguida como sectas destructivas; hoy, con aquello de la libertad de cultos y la insatisfacción humana en temas religiosos, encuentran un hueco donde desmoronar conciencias y arrebatar el dinero con técnicas esotéricas inútiles.
Para finalizar, dejemos la denuncia del abogado penal Héctor Navarro, la cual Isha, desde luego, y como cabría de esperar, negó:
Justamente darnos cuenta de ello (que somos 100% humanos) nos evita pensar que somos 100 % divinos pues comprendemos mejor que nadie nuestra naturaleza, donde se origina nuestros instintos y de donde proviene ciertas formas de comportarnos gregariamente.
Con esto evidencia Isha que no tiene idea de lo que habla. Pero es que si fuera coherente nadie le haría caso.
CONCLUSION
Al examinar la filosofía y las técnicas de Isha, para cualquier persona con un mínimo de sentido común, no le resultará difícil darse cuenta que es un timo. Un engaño más de los charlatanes de turno que amasan fortunas a costa de gente que quiere sentirse mejor o que se sienten insatisfechos con lo que tienen.
No reviste un análisis profundo porque no es profundo para nada el sistema. Lo que si es delicado es que se trata de una secta que acusa denuncias por “uso ilegal de la medicina”, lavado de dinero por donaciones, manipulación psicológica y demás.
En los años 80 este tipo de movimientos eran caratulados enseguida como sectas destructivas; hoy, con aquello de la libertad de cultos y la insatisfacción humana en temas religiosos, encuentran un hueco donde desmoronar conciencias y arrebatar el dinero con técnicas esotéricas inútiles.
Para finalizar, dejemos la denuncia del abogado penal Héctor Navarro, la cual Isha, desde luego, y como cabría de esperar, negó:
Señor Juez:
HÉCTOR WALTER NAVARRO, argentino, casado, mayor de edad, abogado jubilado, domiciliado en calle Mariano Moreno N° 1045 de la ciudad de Rosario, Pcia. de Santa Fe, ante V. S. me presento y digo:
Que vengo a presentar denuncia por los delitos de Defraudación, Asociación Ilícita, Ejercicio Ilegal de la Medicina y Reducción a la Servidumbre contra Heather Isobel Judd, (alias “Isha” o “Jennifer Lee Duprey” o “Maharishi Sakti Ishaya”), contra Enid Stewart (alias Sadasakti o Sada) y contra Ana María Laracitano (alias “Durga”) con domicilio en esta ciudad de Buenos Aires en calle Salguero 1452 – Planta Baja, a mérito de las consideraciones de hecho y de derecho que paso a exponer:
Los denunciados promueven mediante conferencias públicas un sistema de “sanación” por el cual cobran sumas que oscilan entre seis mil y diez mil dólares estadounidenses (U$A 6.000 y 10.000.-). Hacen su propaganda poniendo como publicidad a actores como Raúl Taibo, Bettiana Bloom, Reina Reech y Osvaldo Laport.-
2°) La primera charla que hace la referida Isha y demás denunciados es gratuita y en ella promocionan el “sistema Isha” de “autosanación”. Prometen que con el sistema los que paguen van a remover el stress del sistema nervioso, van a sanar las adicciones que tengan previamente así como todo tipo de enfermedad física o psicológica, van a curar los ataques de pánico, el insomnio, van a mejorar las relaciones interpersonales y van a expandir y estabilizar una experiencia de amor interna, etc. A fin de lograr todo eso deberán participar en un “seminario” que se hace en un fin de semana, sábado y domingo, de 9 a 17 hs. aproximadamente y por el cual deben pagar la suma de Cien dólares estadounidenses (U$A)